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Para ganar en los playoffs, cada equipo sabe cómo ganar tantas ventajas como sea posible para ellos mismos. Pero la presentación de los Rockets de informes de arrebatos de árbitros a las ligas parece haber ido más allá de los límites. Según Frank Esola, un veterano periodista en el sitio web de The Athletic, la liga ahora tiene una mala impresión de la camiseta Houston Rockets y cree que siguen protestando.

Las interminables quejas de los Rockets sobre los árbitros también afectaron a otros equipos. Sus acciones han golpeado la autoridad del árbitro, y su interrogatorio del árbitro ha infectado a otros jugadores. La NBA se enfrenta ahora a una severa crisis de árbitros. Muchos aficionados incluso acusaron a los árbitros de no merecer usar camisetas NBA.

Jordan advirtió a sus compañeros de equipo en los playoffs de 1998, "No molestes al árbitro. Es el árbitro el que controla el juego. Si no podemos controlar nuestra boca, está dando puntos a nuestros oponentes y cavando hoyos para nosotros". Pero ahora, las palabras de Jordan han sido olvidadas por mucho tiempo.